30 de mayo de 2008

LA FIESTA NACIONAL



Nos encontramos en plena Feria de San Isidro; en Madrid se respira ambiente taurino aunque estemos de vacas flacas y el respetable no salga contento de las corridas. Los entendidos de la fiesta nacional están que trinan con los toros y los toreros; la cosa ya no es lo que era, ni siquiera José Tomás se salva de la quema. A mí, ocho que ochenta porque a las cinco de la tarde estoy currando o echándome la siesta, que también es una tradición muy española.

Mientras tanto la oposición a la tauromaquia sigue creciendo en España. De hecho, la ciudad de Barcelona se ha declarado contraria a las corridas de toros, y las organizaciones PETA y AnimaNaturalis han preparado una campaña publicitaria en la que la Alaska se desnudará para protestar contra la crueldad de la tauromaquia. ¡Qué bajonazo! Ver a Alaska desnuda, I mean.

Ni a favor ni en contra, prefiero no pronunciarme en el eterno debate sobre la sangría española. Han sido muchos los artistas que se han inspirado en la tauromaquía para hacer sus creaciones. Los dos grabados que ilustran esta entrada, pertenecientes a la colección del Museo Picasso de París, expresan gráficamente mi opinión sobre la fiesta nacional, llamada por este artista en cuestión “corrida pornográfica”. Son obra de un bohemio anónimo, íntimo de Picasso y Picabia, y que tengo el placer de sacar a la luz de Internet.

Lo tengo claro, entre el porno y los toros, me quedo con lo primero. Y entre Alaska y los toros, obviamente con lo segundo.

8 comentarios:

Anónimo dijo...

Fiesta Nacional la que hay siempre en tu casa!!!

Anónimo dijo...

Ana SantoDominguez is back!
Very interesting.

pintón dijo...

Oh, Ana, you are Spain to me!

Anónimo dijo...

bueno, que notición!!!
bien venida, Ana Santo Dominguezzzzzzzzz

Anónimo dijo...

qué contención se respira en este blog...

Anónimo dijo...

miss you nancy, madame m, ana santo..where are you?? out of imagination? out of time??

Anónimo dijo...

paco te extraño molto, mis piernas se agitan cuandopienso en ti, eres un deus meus

Anónimo dijo...

Te adelantaste en tus aprecioaciones y ffallaste, Señor Pintón. Parece que José Tomás no sólo se salva de la quema, sino que está mejor que nunca. Pasará a la historia.