7 de abril de 2010

JUDÍA, LESBIANA Y COJA




Estoy seguro de que Jane y yo debimos conocernos en otra vida. No sé si fuimos amigos, hermanos o pareja, pero estoy seguro de que coincidimos y nos llevábamos muy bien. ¿Cómo si no podría explicar la atracción que siento por ella? Cada vez que leo su nombre o alguien habla de ella me emociono, se me eriza el vello y se me saltan las lágrimas (como me está ocurriendo mientras escribo estas líneas). Dos damas muy serias es uno de los libros que marcó mi juventud. Su atmósfera turbia y sorprendente todavía me desconcierta, me sobrecoge y me fascina.

Su única obra de teatro, In the summer house, está a la altura de cualquiera de las grandes obras de su admirador Tennessee Williams. Sin embargo, el poco éxito que obtuvo en Broadway la sumió en una crisis creativa de la que nunca llegó a recuperarse. Aunque ella nunca lo quiso así, la mítica frase de Panero podía haber sido su motto: “el fracaso es la más resplandeciente victoria”. Estaba terminando su segunda novela, En el mundo exterior, cuando sufrió un ataque de apoplejía que dejó mermadas sus capacidades intelectuales. Como curiosidad, sólo basta añadir que Jane rechazó a James Dean para el papel masculino de esta obra: "era demasiado normal, carecía de la dosis necesaria de angustia", escribe Paul a propósito.

Cabeza de gardenia, como la apodó su gran amigo Truman Capote, fue una escritora diferente y una mujer adelantada a su época, incluso hoy en día lo seguiría siendo. Espíritu libre y atormentado, Jane se paseó durante sus últimos años en Tánger de la mano de su amante y criada Cherifa, a quien costeó todos los gastos y regaló sus mejores pertenencias. Sin rendir cuentas a nadie, como las heroínas de sus obras, Jane rompió con todos los tabúes de su época. En las páginas de su escasa obra nos dejó su testamento personal:

“(…) Sabía que no iba a ser feliz porque únicamente los sueños de los locos se convierten en realidad. Sabía que únicamente le interesaba reproducir de nuevo su sueño, pero conseguirlo significaba necesariamente convertirse en víctima absoluta de una pesadilla.”

Se me hace un nudo en el estómago cada vez que releo los desgarradores diálogos de esta chalada pero genial escritora. Esta cita, extraída de Dos damas muy serias, encierra la angustia y el terror de esos personajes vulnerables que no dejan de ser una proyección de ella misma.

Jane, estoy convencido de que nos volveremos a ver.

13 comentarios:

Anónimo dijo...

esta expo te puede interesar:

http://www.alfredovinas.com/exposicion/index.htm

besos

tusesi

RaRo dijo...

El libro "Placeres sencillos" es tan delicioso como inquietante. Mientras escribía uno de sus relatos, Paul la miraba pensar sin levantar cabeza. Le preguntó ¿qué te pasa? ella respondió "Necesito que me digas cómo se construye un puente" para qué, dijo él atónito. "Porque si no lo entiendo no puedo hacer que lo crucen los personajes". Bella y perdida murió sola. Todavía muchos la acompañamos, por lo que veo. Maravilloso homenaje.

Anónimo dijo...

me encanta...

ZiZi Carlos Jeanmarie dijo...

magnifico post.
I love Jane too.

a serious lady dijo...

Estoy contigo, Zizi.

Anónimo dijo...

Muy bonito, Pintón. Cuando te pones, lo bordas. Me creo que se te hayan saltado las lágrimas, siempre has sido un llorica.
I love you

Anónimo dijo...

Jane for ever.

Anónimo dijo...

the best blogger

Anónimo dijo...

Una nota muy buena, Pintón... a mí también me dejó perplejo su Dos damas muy serias. Otro libro que marcó en mi historia como lector un antes y un después (así como su autora) fue El bosque de la noche, de Djuna Barnes. Imagino que lo conocerás. Si no es así, corre rápido a buscarlo. Te encantará...

Anónimo dijo...

Muy grande, Pintón.

març dijo...

qué ilusión leer tu post de Jane! siento casi lo mismo por este personaje fascinante. tengo pendiente desde hace tiempo una visita al cementerio de málaga...
Una consulta, hace años que busco In the summer house y nunca lo encontré, sabes donde podría conseguirlo?!
gracias y felicidades por el blog, lo he descubierto hoy y no puedo dejarlo!

pintón dijo...

Hola Marc, yo también te felicito por tu blog.
Lo leí en inglés, Obras completas de Janes Bowles, es fácil de encontarr en amazon. Pero la editorial Alfama lo acaba de publicar en español. Se títula "En el cenador".

http://www.lecturalia.com/libro/46335/en-el-cenador

Un saludo

Farah y los Clones dijo...

Pues parece que te interesan mucho los estereotipos, solo resta ver el titulo de la entrada. Jane Bowles no entró en ninguna crísis creativa, toda la gente que escribe no tiene por que hacer libros como rosquillas ni triunfar ni nada de eso. Más gastos en sus amantes masculinos tenía su marido, el traído y llevado icono de los gay pretendidamente intelectuales, y por eso escribía libros malísimos y los vendia como churros. Ya ves que existen diferencias de criterio, en cuanto a escribir, ganar dinero, el éxito y la homosexualidad... Un gran respeto para Jane Bowles.