Madrid en sí misma está repleta de horrores estéticos que otro día, de mala gana, me dispondré a repasar. Pero además, los viandantes de esta noble villa nos siguen dando sustos en forma de atentados al buen gusto, el decoro o los sentidos. Aquí algunas de las más sonoras:
Los pantalones piratas: las tendencias más feas y horteras son las que más arraigan en esta soleada península. Los piratas, feos como ellos solos, además de sentar mal y hacer paticortos a quienes los llevan, se ha hecho fuerte en el armario masculino y femenino.
Las decoraciones pop: El gusto de los malasañeros modernos es más que dudoso. Especialmente se hace notorio en las decoraciones de estética pop de las casas. No saben y no se interesan, así que se van a lo más fácil. Menos mal que las fotos de la casa de Chloe Sevigny en alguna revista de tendencias (hay que decir que hecha por un decorador) ha hecho que más de uno empiece a quitar las portadas de los discos de las paredes.
Las mariconeras: Ejemplo de accesorio masculino tan útil como feo. Y si es de marca, como el de Prada, ya es como para borrarse del género humano. Al menos sus predecesoras, las riñoneras, tenían algo más de gracia, aunque solo sea por lo bacalas que eran.
Los calcetines cortos: Esto no tiene perdón de Dios. No hay derecho. Ni para hacer deporte tienen un pase. Muchos no me seguirán en este punto por ser algo tan inefable como subjetivo, pero sé lo que me digo.
La manicura francesa: Otra de esas modas que ha cuajado con vehemencia entre mis compañeros del metro. El daño que produce a la vista es comparable al de ver a belén Esteban a plena luz del día sin maquillar.
La estética Zombie Kids: Esa pose ordinaria con la lengua fuera, cara de chulo y el dedo corazón bien erguido; con muchos tatuajes, ellas en shorts y con sujetador asomando; ellos con vaqueros cagados y camiseta de tirantes o camisa abierta hasta el ombligo.
Los flequillos rectos: para él y, sobre todo, para ella. España debe ser el único país del mundo donde todavía no se han pasado de moda. ¿Por qué?
15 de septiembre de 2011
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10 comentarios:
las chanclas de dedo con suela gorda, aarggg..y combinadas con pantalones pirata y mariconera de marca falsa, son lo peor.
un día iba ciega y me enrollé con un tío así. aargg
El minimarika clon o genéticamente idéntico a todos los demás minimarikas, con el pelo lacio y ligeramente grasiento y flequillo peinado ligeramente a un lado. Siempre de shorts o pantalón pitillo, el mini está siempre de morros o enfurruñado. Les encanta Malaseña (no suportan Chueca), los coctels y el MDMA.
Total, el minimarika de madrid es todo un fenómeno.
La estética Zombie Kids has vanished. Ya no les veo por Malaseña y thanks god.
Al final todo son modas.
Y que modas más tremebundas.
Me encanta lo del pelo ligeramente peinado a un lado. Y sucio.
Lo de la estética Zombie es la leche. La verdad es que me dan muchas ganas de potar.
aaaaaaaaaaaaaaaaarrrrggggggggggg!!!!!!! Los Zombie no!!!!!!!!!!!!!!!!!
Estoy hasta los mismísimos huevos de los chicos / chicas que posan creyéndose estar en una peli de Tarantino .(la escena de los 2 dedos en los ojos nunk, etc, etc...) para luego colgar sus fotos en facebook.
A mí los Zombies me dan mucha grima.
Me muero del asco, vamos.
Z.C.J.
el flequillo recto.
odio los pantalones pirata!
Los hombres con mechas en el pelo y los hombres con camisetas ajustadas con escote ... puaj!
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