29 de enero de 2010
DISCO PARTY: ITALIANS DO IT BETTER
El éxito cosechado por la cantante sueca Sally Shapiro el año pasado ha sido la confirmación de que el olvidado italodisco vuelve a estar en boga. Y yo me alegro, porque siempre lo he bailado hasta caer redondo. A los despistados les recordaré que el italodisco, también llamado spaghetti-dance, fue un género musical con que se denominó en los ochenta a la música dance y disco hecha en Europa con sintetizadores, caja de ritmos y vocoders. El alma mater del movimiento fue, sin lugar a dudas, Giorgo Moroder. Mi favorito, La Bionda y su I want to be your lover.
Que la historia es cíclica es algo que se da por sentado, y que la creatividad se nutre de la tradición, también. Musicalmente, la década pasada fue una reinvención continua de viejos sonidos. A principios de los 2000 fue electroclash de Chicks on Speed y Peaches, y después dance-punk de LCD Soundsystem y The Rapture, el neo folk de Devendra y CocoRosie, o el nu-rave de The Klaxoons. Y ahora, en el cambio de década, le toca el turno al italodisco.
Liderando este revival se encuentra el sello americano con base en New Jersey Italians do it better, dirigido por Mike Simonetti. El patrono Mike visita Madrid acompañado de dos de sus mejores bandas, Glass Candy y Desire (solo nos faltaría Chromatics para ver al completo a la plana mayor del sello) para demostrar porque son los reyes del mambo de las pistas de baile de medio mundo. Evolucionando al compás de las modas pero sin subirse al carro de ninguna, Mister Simonetti y su trupe han sabido esperar pacientemente su momento para llevarnos a su terreno, el pop electrónico.
El éxito de prensa y público mayoritariamente underground de los Italianos lo hacen mejor se apoya en las cuidadas producciones de sus recopilatorios -manteniendo el espíritu de las producciones ochentenas pero mejoradas y con remates contemporáneos- así como en el diseño y el art-work de los mismos.
Finalmente me voy a quitar una espina que tengo clavada con Glass Candy desde hace unos años cuando Daniel Fletcher (Ginferno) me los dio a conocer en su casa: “Escucha esto que te va a encantar”; y así fue, al instante, como cuando pruebas, para comprobar si está caliente, una cucharadita de un plato delicioso. La expectación es máxima, ahora tendrán toda la noche del 10 de febrero para tomar la alternativa en el ruedo de la plaza Zombie/Montaña Sagrada y certificar que las buenas sensaciones creadas en torno a este pequeño sello son una realidad.
Glass Candy, Desire y Mike Simonetti (Italians do it better) actuan en la Sala Charada, noche Zombie/Montaña Sagrada, el próximo 10 de febrero.
25 de enero de 2010
HUMOR EN EL FACEBOOK
Facebook, el rey de las redes sociales que tan vertiginosamente están cambiando el mundo, ha desarrollado todo un universo cómico y humorístico que refleja la realidad y las fuentes de inspiración de sus usuarios. Encabezado por las páginas de “señoras que”, este nuevo sentido del humor que tanto gusta a los modernos de chicha y nabo resulta bastante cansino, pero, a su favor, supone una nueva manera de contar chistes y poner especies a noticias de actualidad o acciones cotidianas. Como ejemplo, pueden hacerse fan o unirse a los grupos de:
Ya no canto en la ducha ni silbo por la calle porque tengo miedo a la SGAE.
A mí también me sobra un brazo cuando duermo.
Feas que se hacen hippies para hacer creer que no les importa ser feas.
Señoras que pegan con el bolso a Llamazares porque se creen que es Bin Laden.
Más vale vestir santos que desnudar gilipollas.
Lesbianas que se peinan como Xavi Hernández del Barça.
Señoras que compran unos plátanos del Lidl y acaban de alter.
Señoras que se les duerme la boca cuando comen plátanos del Lidl.
Abrir y cerrar la nevera esperando encontrar comida nueva.
Señoras que bailan toda la noche con el bolso debajo del sobaco para que no se lo roben.
Tú no eres moderno, tú eres gilipollas.
Señoras parisinas que salen a comprar un croissant y acaban en Dior.
Señoras que piensan que hacer cruising es imitar a Tom Cruise
Ya no veo la diferencia entre los esquizofrénicos y los que usan el manos libre.
Yo también dije todo el mundo y eran tres personas.
Modernas que van de fotógrafos y hacen sesiones con otras modernas.
Modernas de palo que van de estilistas.
Lavadoras que se van a una rave y aparecen abandonadas en medio del campo.
20 de enero de 2010
I LIKE BORING THINGS
Aunque depende mucho del día y del estado de ánimo, en general me gustan las cosas aburridas, que tanto parecen disgustar a la gente moderna y nocturna. Normalmente suelen estar relacionadas con la bendita paciencia, que en mi caso no es la mayor virtud. Pero voy aprendiendo.
Te pierdes una parte importante de la vida si no sabes disfrutar de lo que muchos consideran un plomo. No sólo de diversión vive el hombre. Y no decirme que me estoy haciendo mayor, porque entonces no habéis entendido nada.
Leer libros ladrillos; para aprender y saber entender ciertas cosas de la vida hay que aburrirse leyendo; cuando acabe con Tobías Wolf empezaré con Los Buddenbrook.
Conversaciones serias; estoy harto de las conversaciones divertidas y superficiales (el ji ji, ja ja, vamos) que se mantienen por la noche; necesito hablar de cosas que me aporten y me dejen poso.
Las formas y la buena educación; pueden resultar pesadas de tan formales y ceremoniosas, pero es un básico indispensable en mi vida y en mis relaciones: Si no hay educación, directamente a la lista negra.
No perder el tiempo con la tele; no me gusta el entretenimiento per se en el que no tienes que darle a la materia gris aunque sea mínimamente; todos esos programas populares y vacíos que tanto entretienen a la gente, directamente los evito porque me dan mal rollo.
Los horarios y la vida estable; mi mente tiende por naturaleza a la dispersión, de ahí que necesite horarios y rutinas para centrarme y ordenar mi vida. Por fin le he cogido el punto y el placer a la repetición de actos cotidianos.
Escuchar los discos en solitario de Nico; pueden parecer pesados, tristes, densos, pero son precisamente esos adjetivos los que la engrandecen y la hacen única; sus canciones me producen un placer melancólico, casi litúrgico que la diferencian de hypes discotequeros y alegres tipo Lady Gaga o sucedáneos de los que salen en las páginas del EP3.
Leer las páginas de Economía y mirar el IBEX 35, incluso el suplemente de economía de los domingos que antes tiraba directamente, ahora amenizan la lectura del periódico. Cada vez me gustan más estos textos prolijos que me obligan a buscar palabras en el diccionario.
Y para colmo, estoy empezando a interesarme por la música clásica. ¿Por qué compositor empiezo?
12 de enero de 2010
DIEZ RAZONES PARA VER EL DOCUMENTAL DE YVES SAINT LAURENT
La gran Pachi Subbuteo me ha traído de su estancia en Sanghai, donde estuvo pinchando música vintage (calypso, hawaiano, cincuentas), un documental sobre la vida y obra de Yves Saint Laurent. Conclusión: que me he terminado de rendir al gran maestro. No quería que terminase, podría haber estado seis horas más escuchándolo. Estas son las 10 razones por las que me ha encantado conocer a Yves Saint Laurent:
Porque fue el primero en incluir modelos negras en los desfiles.
Por declaraciones tan dolientes y verdaderas como: “El proceso de creación es muy doloroso y nace de la infelicidad, nunca de la felicidad”.
Porque a pesar de tenerlo todo, fue toda su vida una persona triste.
Porque se comía el hachís para que le subiera más.
Porque su máxima influencia era Marcel Proust. “El único paraíso es el paraíso perdido”, sentencia Yves.
Por incluir el esmoquin en el vestuario femenino y ser el primero en apostar abiertamente por el look andrógino. En definitiva, porque siempre supo arriesgar.
Porque su logo, que no ha cambiado desde su creación en 1965, es insuperable.
Por no reprimir el lado oscuro de la vida como parte fundamental de su personalidad y de su proceso de creación.
Por el escándalo que supuso el anuncio del perfume masculino M7. De hecho, nadie en el mundo de la moda se ha atrevido a repetirlo.
Porque a diferencia de los otros tótems vivientes como K. Largerfeld o Valentino, era un personaje real, de carne y hueso, y quería a las mujeres, fundamental para entenderlas y saber vestirlas.
5 de enero de 2010
NOCHE AMERICANA EN COMPORTA, PORTUGAL
No hay nada mejor que pasar la fiesta de Nochevieja en compañía de amigos; si la Nochebuena la vivo como una fiesta familiar y de recogida, la entrada del nuevo año es todo lo contrario: jarana, diversión y champagne a go-gó. El año pasado, tal y como relaté en este rincón, marché con una pandilla de lo más variopinta al norte de África, y este año, en número más reducido y con una actitud más casual y campestre, a la reserva natural de Comporta, en Portugal. Un lujo ibérico al alcance de muy pocos, para que os voy a mentir. No ganamos la lotería, pero a cambio la ruleta de la fortuna nos regaló unos días en el paraíso de Comporta
La compañía, como decía, es fundamental, pero si le sumas el escenario perfecto, la utopia se hace realidad. Durante cuatro días nos creímos elfos de un cuento de hadas, viviendo en pequeñas casitas de un buen gusto insuperable, en las que el más pequeño de los detalles está preparado para hacerte la estancia más agradable; siestas al calor de las chimeneas que caldeaban las casitas; largos paseos entre arrozales, canales, colonias de líquenes y pinares que desembocan en el Atlántico que rompía en la arena con toda su fuerza; arroz caldoso con piripiri en O Tobias; emocionante noche americana que nos permitió un paseo nocturno por el pinar el 31; saludables y aireadas resacas; ni un solo bar/disco en veinte kilómetros a la redonda; guerra de i-pods y concursos culinarios (curry de gambas, alcachofas y solomillos, risotto de boletus…); música clásica para jugar al continental; visita a Julio, el mejor chamarilero de la península donde todos nos hicimos con grandes gangas; las polainas de Chiquiño y el dosel de Nono… Podría seguir hasta el infinito porque son tantas las imágenes que me he traído en la retina de estos maravillosos días, pero no es plan de aburrir, aparte de que los cotilleos sabrosones son cuestión de familia y se quedan para nosotros.
Recibimos el año saltando de la silla con el pie derecho, tal y como manda la tradición lusa, pero cambiamos sus uvas pasas por nuestras uvas de la suerte de toda la vida. Afortunadamente nos perdimos a Belén Esteban y a su grimoso compañero. Queridos lectores, menos mal que nos queda Portugal. Es más, yo quiero ser portugués, o que Portugal y España sean una. Señor presidente, tengo una pregunta para usted. ¿Por qué no cambiamos Cataluña y el País Vasco por Portugal?
Un año más, he de decir que he disfrutado la navidad y el nuevo año como un niño pequeño, y es que no lo puedo evitar, me encantan estos días y siempre me lo paso fenomenal. Lo siento realmente por todos aquellos que odian y critican la navidad, no saben lo que se pierden.
Suscribirse a:
Entradas (Atom)