25 de agosto de 2008

LA NUEVA IMAGEN DE NADAL


Uno de los momentos que he vivido con más intensidad e ilusión en estos JJ. OO. ha sido la victoria de Rafa Nadal, el flamante número uno del tenis mundial. Reconozco que hasta hace un año Nadal no era santo de mi devoción y me decantaba siempre por Federer en las contiendas que ambos disputaban. Sin embargo, mi impresión sobre Nadal ha cambiado totalmente, o mejor dicho, Nadal me ha conquistado y ha hecho que me trague todo lo que había dicho y defendido con uñas y dientes. Ahora Federer me parece un cursi más preocupado en no despeinarse que en ganar partidos.

Nadal es el mejor deportista español de todos los tiempos, con una mentalidad y una concentración sólo destinada a los más grandes campeones, una dignidad y honestidad sólo comparable a la Zidane (ya sé que el francés son palabras mayores) y una simpatía natural que cautiva día a día. Y, además, es mediático y cae bien, no como el baboso de F. Alonso. El único punto negro que le quedaba a Nadal era su look: pantalones piratas, camisetas sin magas y cinta en la cabeza a lo sandokán.

Una imagen de la que no era responsable el propio Nadal, sino la firma que lo viste. Nike pretendía dar la imagen de un tenista guerreo y batallador en contrapunto con la de dandy de postín reservada para el suizo. Pero esa imagen infame con la que los responsables de la firma americana identificaban a Nadal ha pasado a la historia, y en este Open de Estados Unidos Nadal no sólo estrena el liderato del tenis mundial, sino también nueva indumentaria (en la imagen). Nike nos presenta a un Rafa con un look bastante parecido al del su rival, es decir, con pantalones blancos por encima de las rodillas y un polo silueteado que le armoniza y esconde sus músculos. No se aguantaban más esas remeras sin mangas.

El reinado de Nadal acaba de comenzar. Y que dure mucho tiempo.

18 de agosto de 2008

FRANCIS BACON


Francis Bacon es hoy en día uno de los pintores más cotizados en el voluble mercado del arte internacional. De hecho, sus recientes obras subastadas han liderado las últimas pujas londinenses, consagrándose como uno de los pintores más rentables de la historia del arte contemporáneo. Hasta el todopoderoso magnate y dueño del Chelsea, Roman Abramovich, ha comprado una de sus obras.

Bacon, nacido en Irlanda pero de familia inglesa, murió en Madrid a los 82 años de edad. Era una habitual del mítico Cock, y todavía son muchos los que peregrinan hasta la calle de la Reina en busca de la inspiración creadora del genial artista anglo-irlandés. Bacon es uno de los hijos adoptivos más reconocidos por la ciudad de Madrid, como se demostrará en la súper exposición que está organizando el Museo del Prado para el próximo 2009. Sí, han leído bien, el Prado. Conociendo su obra y su admiración por los grandes maestros como Goya, Velázquez o Rembrandt, tiene todo el sentido del mundo.

La genialidad de su obra, de una gran potencia y singularidad, nadie la pone en duda. Sin embargo, tanto como su propio legado pictórico me interesa su controvertida biografía. En su caso, vida y obra se encuentra estrechamente relacionados por lo que resulta difícil entender su imaginario sin conocer los datos relevantes de su existencia. Al mismo tiempo hay que recordar que Bacon siempre negó que sus pinturas sirvieran para explicar su propia vida.

Hijo de una familia inglesa puritana, fue expulsado de casa a los 16 años de edad cuando su padre le descubrió probándose la ropa interior de su madre. Se marchó a Londres con una exigua pensión. Al poco tiempo, su padre le envió un tutor muy ‘macho’ para evitar que se desviara. Este lo llevo al Berlín de la República de Weimar, lugar en el que la homosexualidad no estaba permitida, pero sí muy tolerada. Allí, el que tenía que ser su ejemplo de masculinidad, lo violó.
En Berlín, Bacon reafirmó y desarrolló sus tendencias homosexuales y sado-masoquistas, que se ven reflejadas posteriormente en su pintura. Allí, convive con el expresionismo y bebe de las fuentes de la Bauhaus.

Cuando vuelve a Londres diseña muebles inspirados en el movimiento alemán, adquiriendo cierto éxito que le hace relacionarse con la alta sociedad londinense. Completa la financiación de su existencia prostituyéndose y publicitando sus servicios en el periódico The Times.
Durante la II Guerra Mundial estuvo en varias ocasiones a punto de morir en los bombardeos.

Empieza a pintar intermitentemente hasta que se dedica más seriamente y empieza sus Crucifixiones. Luego ya le vino la fama que siguió cruzándose con su atormentada vida privada. Tuvo dos novios que se suicidaron. Uno, vía autodestrucción y el otro con barbitúricos.
El grito de vida, de dolor, culpa, represión sexual, histeria, fragilidad, magnificiencia y sutileza del ser humano queda reflejado en sus figuras deformadas por el espasmo del instante y siempre aisladas del exterior. La incomunicación es otra de sus constantes.

Sus cuadros que no son expresionistas, ni abstractos, pretenden “hacer visible lo invisible”. Son un discurso sobre el ser humano.
Sus crucifixiones lacerantes están llenas de dolor y sexo reprimido y culpable. Un gran sentimiento de culpa envuelve toda su producción. Lo demuestran las posturas de sus figuras y la pasividad de sus cuerpos. También sus hombres a medio camino de la animalidad: una animalidad sumisa. Y la degradación humana. Los organismos que pinta ensangrentados hablan de lo efímero y del diabólico porvenir.
Sus cuadros son reflejos de ese abismo al límite que vivió él y su época. Sus perros corresponden al ser humano tras la II Guerra Mundial.
Bacon, en una ocasión lo reconoció, quiso reflejar la crueldad en su obra, porque es lo que veía. Tenía una concepción pesimista y nihilista del ser humano.

En su obra están presentes todos los elementos que le torturaban: su homosexualidad, su sadismo y sus miserias.
Sin embargo, y aunque parezca lo contrario, Bacon fue un artista generoso cuya verdadera finalidad era promover un mundo mejor.

“El arte ya solo puede ser un juego”, señaló Bacon poco antes de su muerte.

12 de agosto de 2008

II ENCUENTRO SURREALISTA DE MOLINICOS


Este fin de semana (días 15, 16 y 17) se celebrará en el pueblo albaceteño de Molinicos, localidad donde se rodó la mítica película de José L. Cuerda Amanece que no es poco, la segunda edición del encuentro surrealista de Molinicos.

Imagino que todos se acuerdan de Amanece que no es poco, aquel film en el que los hombres crecen en los bancales, las mujeres se reunen para elegir a la puta, la marimacho y las adúlteras del pueblo, una madre le confiesa a su hija que por fin le ha venido la regla y un personaje sin papel vaga por las calles del pueblo. Humor surrealista, absurdamente culto e inteligente, al más puro estilo de los mejores Faemino y Cansado y de la tradición del esperpento castizo. Una de mis películas favoritas del cine español de todos los tiempos que habré visto una docena de veces… y las que me quedan.

-Le dije a usted, cuando me pidió permiso para ejercer de escritor en el pueblo, que era mejor que hiciese lo que hacen los otros sudamericanos, que unos días van en bici y otros huelen bien. [...] Y ahora me dicen que ha escrito usted "Luz de agosto", la novela de Faulkner, ¡de William Faulkner! [...] ¿es que no sabe que en este pueblo es verdadera devoción lo que hay por Faulkner?

- Yo he pensado que también me interesaría ser intelectual, como no tengo nada que perder.

Gabriela Martí es el simpático y divertido personaje que se encuentra detrás de la organización de este singular encuentro. Nacida y educada en los Estados Unidos, su padre era de Molinicos por lo que de pequeña, hace más de veinte veranos, tuvo la oportunidad de asistir a algunas escenas del rodaje. Desde entonces no ha parado hasta homenajear a la película más emotiva de su infancia y de su intrahistoria personal.

Para combatir la canícula que nos abrasa estos últimos días, y para todos aquellos fans de la película que no tengan mejor plan en este caluroso puente que se avecina, les propongo que se den un borneo por la fresquita plaza del pueblo de Molinicos y se dejen llevar por los improvisados saraos que allí se producirán. Eso sí, no olviden que “señor alcalde, todos somos contingentes, pero sólo tú eres necesario.”

6 de agosto de 2008

LA ISLA DE LAS LESBIANAS


Hace unos meses saltó la noticia de que las autoridades y habitantes de la isla griega de Lesbos pedían oficialmente que en Grecia el adjetivo lesbiana se utilizara únicamente como gentilicio. Pedían que la denominación "lesbiana" responda sólo a un gentilicio y que se excluya de su acepción homosexual. Al parecer los habitantes se sienten insultados y acomplejados por el doble significado de este término. Alegan que históricamente, hasta 1911, el significado de lesbiana había sido exclusivamente el del gentilicio y relativo a la isla de Lesbos.

"Me siento incómodo, y en especial, mis parientes femeninas, cuando responden que son lesbianas (de Lesbos) o que tenemos costumbres lesbianas", declaró el director de la revista de cultura Davlos de la isla, Dimitris Lambru. Ante declaraciones tan arrolladoras como esta sólo se puede agachar la cabeza y darse media vuelta con el rabo entre las piernas.

Recordemos el origen histórico del nombre, (puesto en duda en los últimos años), cuando hace unos 2600 años la poetisa Safo, oriunda de la isla, mantenía relaciones sexuales con sus discípulas y expresó en sus versos su amor por otras mujeres. En realidad, y según nuevas investigaciones, Safo tenía familia y se suicidó por el amor no correspondido de un hombre.

Aunque a día de hoy son más los países que prohiben y castigan el sexo entre hombres que entre mujeres (como por ejemplo, en Brunei, Bangladesh o Tanzania), lo cierto es que la comunidad lésbica sigue siendo una de las más discriminadas; discriminadas en muchos casos doblemente, por su condición de mujer y de lesbiana; lo interesante de todo esto es que, no por esa especie de ostracismo degradante, han sido muchas las mujeres famosas e influyentes que a lo largo de la historia han reconocido abiertamente su orientación sexual.

A continuación la lista de mis lesbianas famosas favoritas:

Jane Bowles
Susan Sontag
Martina Navratilova
Gertrude Stein
Lindsay Lohan
María Teresa Fernández de la Vega
Virginia Wolf
Georgia O´Keeffe
Greta Garbo
Frida Kahlo
Marguerite Yourcenar
Jodie Foster
AnneMarie Schwarzenbach
Lina Morgan
Encarna Sánchez